Muchos estudios demuestran que más de un 80% de los jugadores rinde bien en los entrenamientos, durante los partidos oficiales esa cifra baja a un 30%, y si hablamos de una final, únicamente un 10% muestra su máximo nivel.

Atrás hemos dejado el mito de que lo único que funciona en el fútbol es el talento, y hemos evolucionado a la importancia de un equilibro entre cuerpo y mente.

Los jugadores profesionales deben entrenar su mente, igual o más que su parte física. Aquí puedes encontrar algunas de las razones más importantes:

– Entrenar la mente:

Cómo hemos hablado en la introducción, más de un 80% de los jugadores rinde bien en los entrenamientos, durante los partidos oficiales esa cifra baja a un 30%, y si hablamos de una final, únicamente un 10% muestra su máximo nivel. Aquí añadimos que menos de 1% rinde a su máximo nivel cuando se enfunda la elástica de su selección. Todo esto tiene relación con el entrenamiento mental.

– El fútbol y la inteligencia:

Dentro de todos los tipos de inteligencia, la más importante es la inteligencia emocional. La manera que tiene un jugador para adaptarse a todo tipo de situaciones dentro de un partido. Tomar decisiones en milésimas de segundo, y que esas decisiones sean las correctas. Si un jugador toma decisiones correctas pero necesita mucho tiempo para realizarlas, no estamos hablando de un buen jugador.

– Técnicas de visualización:

Hablamos del una técnica cognitiva en la que imaginas una situación concreta, un partido concreto. Esto te ayudará a afrontar de manera satisfactoria dichos momentos, como por ejemplo, el lanzamiento de un libre directo en la frontal del área.

 

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